|
Exaltación del sentido del gusto Grabado y dibujo. Heikki Kukkonen. Taller Gravura. Málaga. C/ Coronel, 3. Hasta el 24 de octubre de 2005. Conocido anteriormente por dibujar temas relacionados con la playa, en los que representaba toldos a rayas y un ambiente con un aire muy mediterráneo, Heikki Kukkonen (Ilomantsi, Finlandia, 1954) lleva algún tiempo dibujando y grabando al aguafuerte y a la aguatinta estos alegres y coloristas bodegones que, además de aludir a aspectos cotidianos de la vida, constituyen una exaltación del sentido del gusto. Pero en estas vivísimas naturalezas muertas, tan abundantes de hortalizas de nuestros campos y que se venden en nuestros mercados, sobre todo cebollas, pimientos, coles, espárragos, zanahorias, alcachofas, nabos y acelgas, a pesar de la admiración de Kukkonen por el tratamiento de estos temas en la pintura española del siglo xvII, hay un enfoque completamente distinto, mucho más contemporáneo. Kukkonen conoce y admira las alegorías de los sentidos pintadas por Ribera, como esa alegoría del «Gusto», interpretado a través de un corpulento y sonriente comedor y bebedor, que se conserva en la Norton Simon Foundation de Pasadena, del mismo modo que siente predilección por los espléndidos bodegones de Sánchez Cotán, pero sus intenciones son muy distintas al realismo de base religiosa que puede haber en los cuadros del pintor cartujo establecido en Granada, o del naturalismo caravaggiesco del pintor de Játiva. Si en el caso de Sánchez Cotán, con independencia de la expresión de sus intereses como hombre de religión, advertimos el interés quizás mayor de su experiencia como pintor, esto es, la soledad del artista ante el motivo, en las obras de Heikki Kukkonen, donde la forma monumental se funde con la riqueza cromática, hay como una cálida alegría de vivir, como una celebración pagana de los productos de la naturaleza, como un encendido homenaje a esos sencillos frutos de nuestras huertas tan llenos de color y de propiedades olfativas y gustativas. © Enrique Castaños Alés Publicado originalmente en el diario Sur de Málaga el 7 de octubre de 2005
|