Mies van der Rohe y el significado del hecho

Arquitectura y diseño. Ludwig Mies van der Rohe. Arquitectura y diseño en Stuttgart, Barcelona y Brno.

Centro de Exposiciones de Benalmádena. Avenida Antonio Machado, 33. Hasta el 28 de julio de 2002.

Perteneciente, junto a Walter Gropius y Bruno Taut, a la nueva generación de arquitectos alemanes que, entre 1907 y 1914, madura en la Deutsche Werkbund (asociación gremial alemana cuyo fin es ennoblecer el trabajo artesano relacionándolo con el arte y con la industria), Ludwig Mies van der Rohe (Aquisgrán, 1886 – Chicago, 1969), hijo de un maestro cantero con taller propio, se formó en los estudios de Peter Behrens y Hendrik Petrus Berlage y en sus años de juventud recibió una apasionada influencia del neoclasicismo de Schinkel.

La presente exposición, organizada por Vitra Design Museum y comisariada con indudable acierto metodológico por Matthias Kries, se centra en las tres obras fundamentales realizadas por Mies en Europa, así como en el mobiliario diseñado al efecto: la casa en fila en la Weissenhof de Stuttgart (1927), el Pabellón Alemán de Barcelona (1929) y la casa Tugendhat en Brno (1930). Mies van der Rohe. Silla Brno (detalle). 1929-30. Acero tubular cromado, tapicería de seda. Fabricada por Berliner Metallgewerbe Joseph Müller o por Bamberg Metallwerkstätten, Berlín (como MR 50). 78 x 55 x 58 cms. Centro Georges Pompidou / Colección Alexander von Vegesack. Tanto por las innovaciones espaciales que suponen, especialmente por la introducción de la idea de un continuum espacial y la pureza geométrica de las formas, como por la extraordinaria calidad de los materiales empleados (en Barcelona y Brno) y el exquisito y elegante diseño de los muebles, estas obras constituyen auténticos paradigmas del Movimiento Moderno y revelan la plena madurez del arquitecto antes de su etapa americana.

En la Weissenhof, una colonia experimental realizada con motivo de la exposición del Werkbund en Stuttgart que planteaba el complejo problema de la vivienda moderna, Mies, que también trazó el plan general, construyó un bloque exento de apartamentos de cuatro pisos cuya estructura de acero permitía una libre disposición de los espacios interiores según las necesidades de sus habitantes, a excepción de las escaleras, cocinas, cuartos de baño y ventanas. El Pabellón de Barcelona es en cierto modo una traducción arquitectónica de concepciones plásticas de Malévich, Mondrian y El Lissitzky, esto es, una obra geométrico-suprematista en la que se puso mucho cuidado en la selección de los materiales (mármol, ónice, cristal, travertino) y que debido a su desnudez y meditada simplicidad, funciona, al decir de Tafuri, como «lugar de la ausencia», como un espacio metafísico donde el espíritu se serena. El mobiliario es un prodigio de pulcritud, elegancia, sencillez, calidad técnica y funcionalidad. En cuanto a la villa Tugendhat, resulta asombroso e insuperable el aprovechamiento de la suave pendiente de la parcela, la interpenetración y fluidez del espacio central de la planta noble, la riqueza de los materiales y la perfección técnica de los acabados, creando esa «existencia de acuario» tan peculiar a la que se refirió Giedion. De nuevo la silla Brno es una cima del diseño del período de entreguerras.

©Enrique Castaños Alés

Publicado originalmente en el diario Sur de Málaga el 22 de julio de 2002