Las dimensiones invisibles de la creación

Instalación. Guillermo Paneque.

Centro de Arte Contemporáneo. Málaga. C/ Alemania, s/n. Hasta el 19 de marzo de 2006.

En continuación con sus trabajos anteriores, Guillermo Paneque (Sevilla, 1963) reflexiona en esta exposición de título ambiguo, Aproximadamente, una película es mostrada, rebobinada y vuelta a mostrar. Málaga, 20 de enero al 19 de marzo 2006, sobre el modelo procesual de exposición, sobre el tiempo invisible que invierte el artista en concebir, producir y presentar su obra, convertido en espacio. El análisis va dirigido hacia el modelo lineal de intervención artística, como si necesariamente un objeto siguiese a otro objeto, un texto a otro texto, de tal modo que finalmente se ofreciese el resultado concluso y cerrado del trabajo. Paneque no entiende de este modo la creación artística, porque a él lo que verdaderamente le interesan son las discontinuidades, los vacíos, las interrupciones, los flujos de información que el artista establece con múltiples personas, las interconexiones entre unos trabajos y otros, de tal manera que nunca puede hablarse de una obra terminada, pues ella describe un inmenso e infinito bucle cuyo propósito no es otro que la interrogación sobre el fundamento de lo artístico.

Las travesías discontinuas, llenas de vueltas y de reflujos, que el artista recorre entre uno y otro objeto, entre una y otra exposición, nos están mostrando el cuestionamiento de la relación espacio temporal fija y estática que se da en la mayoría de las exposiciones. La exposición como modelo que interroga acerca de los itinerarios sobre los que se construye la obra artística. Las piezas que aquí se muestran no son, por tanto, obras conclusas e individuales, independientes y cerradas sobre sí mismas, sino objetos que interrogan sobre los interrogantes mismos del acto productivo, objetos que cuestionan la relación entre palabra e imagen, objetos que nos hablan de lo que hay más allá de la obra, de lo invisible del proceso creador. De ahí el carácter de circularidad, de trayectoria descentrada sobre las variaciones del preguntar que presenta el trabajo de Paneque. Lo que él quiere que nos planteemos son preguntas del tipo ¿cómo se hace la obra?, ¿dónde se hace y por quién?, ¿bajo qué condiciones y cuándo?, y, sobre todo, ¿cuánto de todo ello puede ser mostrado en la obra finalmente presentada?

Como muy bien ha entrevisto Anja Krakowski, Aproximadamente, una película es mostrada, rebobinada y vuelta a mostrar. Málaga, 20 de enero al 19 de marzo 2006, es una exposición hecha por las páginas rescatadas de la papelera, aquellas que nos proporcionan un respiro y una interrupción en la estructura lineal del discurso, una exposición escrita por notas al pie, construida por avances, expectativas y promesas, edificada sobre memorias futuras y preguntas sin resolver, esto es, aquí hallamos residuos reaprovechados de trabajos anteriores, objetos presentados de tal forma que nos dan ciertas claves sobre su génesis y gestación, del mismo modo que también hay embriones de futuras exposiciones, potenciales creaciones que adquirirán forma concreta más adelante. Porque todo es un decurso construido a saltos, con avances y retrocesos, con afirmaciones y negaciones.

Cada una de las cuatro piezas de que consta la muestra, reinciden en el principio de la yuxtaposición, en las relaciones cruzadas espacio-temporales, en el desplazamiento del punto de vista de quien percibe, el espectador. En una de ellas, una Mobylette travestida de motocicleta contemporánea se presenta con el embalaje con el que fue devuelta de una exposición anterior, contando en cierto modo su propio proceso temporal. La pieza se concibe en Málaga como un volver a pensar situaciones y procesos anteriores, estableciendo además conexiones mentales con imágenes de la obra en otros contextos que hay pegadas en otra pared de la sala, imágenes que en algunos casos se ocultan y sólo pueden sospecharse. Lo significativo es saber, a través de esta pieza tomada como ejemplo, que todo está aquí, en la exposición, pero que también está en otra parte, en un momento anterior, de la misma manera que estará en una muestra posterior. El bucle se repite indefinidamente, pero con variaciones que lo enriquecen.

© Enrique Castaños Alés

Publicado originalmente en el diario Sur de Málaga el 27 de enero de 2006