Coherencias profesionales

Selección de artistas vinculados a tres asiduas y arriesgadas galerías de la Feria Internacional Arco

Diversas técnicas. Tres galerías en Arco.

Colegio de Arquitectos de Málaga. Paseo de las Palmeras del Limonar, s/n. Hasta el 29 de febrero de 2000.

Esta atrevida exposición, inteligentemente comisariada por el escritor y crítico de arte Alfredo Taján, plantea como mínimo un conjunto interrelacionado de tres cuestiones de la más viva actualidad acerca del estado hodierno del arte contemporáneo en España y sus perspectivas de futuro. En primer lugar, qué papel corresponderá desempeñar a las galerías privadas durante los próximos años en la definición del gusto estético y en el complejo y a veces reservado proceso de difusión y recepción entre el público aficionado de las propuestas artísticas del presente inmediato. En segundo lugar, qué cosa sea exactamente la cuando menos exitosa y multitudinaria Feria Internacional de Arco de Madrid. En tercer término, cuáles serán las líneas estilísticas fundamentales por las que habrá de discurrir el arte del inminente decenio.

Naturalmente, no es el propósito de este breve comentario el responderlas, y no tanto por el espacio de que dispongo cuanto por la dificultad intrínseca que en sí encierran, según pone de manifiesto la interminable controversia que suscitan entre los expertos. Sin embargo, sí me parece oportuno expresar mi opinión general al respecto. Aun cuando empiezan a detectarse cambios significativos en el proceso de selección, difusión y comercio de los productos artísticos, en gran parte como consecuencia de los nuevos hábitos potenciados desde Internet y los canales digitales de comunicación, las galerías continuarán cumpliendo su función de intermediarias entre los artistas y el público espectador o comprador, entre otras razones por la capacidad propia del mercado para adaptarse a las nuevas relaciones económicas y de consumo impulsadas por el universo virtual. En cuanto a la Feria de Arco, y en ello han coincidido los representantes de las tres galerías que exhiben ahora piezas de algunos de sus artistas en Málaga, no tendrá más remedio, si quiere mantener su prestigio, asegurar su independencia y contar de verdad en el mercado internacional de arte contemporáneo, que endurecer las condiciones de selección de galerías participantes, ampliar su superficie y renunciar progresivamente a las subvenciones oficiales y a la nutrida presencia de expositores institucionales. Mucho más difícil es aventurar la incierta senda por la que transitará el arte del próximo decenio, pero a tenor de la multiplicidad discursiva de los últimos años, y una vez agotado definitivamente el proyecto utópico de la vanguardia de organizar, a partir del arte, una nueva praxis vital, creo bastante probable que su orientación se dirija hacia formas de resistencia frente al pensamiento único, la globalización y el neoconservadurismo que representa lo políticamente correcto, esto es, hacia el multiculturalismo, el mestizaje, el diálogo interétnico, la revisión crítica de todo el arte del pasado, no sólo del producido en occidente, el incremento de la idea de fragmento, el ocaso de la hegemonía del centro, el desvanecimiento de las fronteras entre los géneros y el uso creciente de los nuevos medios tecnológicos. No otro es el espíritu que preside las propuestas de las galerías Siboney, Fúcares y Juana de Aizpuru ofrecidas en esta muestra.

©Enrique Castaños Alés

Publicado originalmente en el diario Sur de Málaga el 26 de febrero de 2000